Imágenes increíbles se pudieron observar en Irán, cuando un río rojo desembocó en el mar de la Isla de Ormuz.
Los expertos han explicado que se trata de ocre, un pigmento natural de tierra arcillosa, que es una mezcla de óxido de hierro.
El ocre se ha utilizado a lo largo de la historia para pintar, teñir telas, objetos, pintarse el cuerpo.