El enviado especial del presidente de Estados Unidos para Misiones Especiales, Richard Grenell, defendió la postura de Donald Trump de estar abierto a conversar con el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro Moros.
Grenell rechazó el cuestionamiento de que el diálogo con Maduro sea un signo de debilidad.
“No creo que hablar con Maduro sea una posición débil,” afirmó el diplomático, reafirmando que está “totalmente en desacuerdo” con quienes lo critican.

