Un vendedor ambulante en una avenida de Florida, al parecer Venezolano, fue abordado por las autoridades Americanas para solicitarle los permisos para vender alimentos en tierras norte Americanas.
Al parecer no tenía la permisologia y fue obligado a botar todos los productos por la falta antes descrita, en el sitio se encontraban varias personas de acento venezolano dónde criticaban a los funcionarios alegando con su poco inglés que ellos tenían hambre, que no se hacía, que ese era el sueño americano.
En las redes las críticas a esta persona ha Sido contundente ya que las reglas de los países deben ser respetadas.