La magistrada Blanca Alfaro, quien ha recibido amenazas de muerte en el pasado, anunció su renuncia al Tribunal Supremo Electoral (TSE) en el marco de la segunda vuelta para elegir al presidente de Guatemala.
«Mi función llega a esta elección, para eso me eligieron. No renuncié antes porque era el momento de cumplir con mi país. A partir del día martes, estoy considerando presentar al Congreso de la República (su renuncia) y someterme a cualquier juicio que esté en investigación como una ciudadana común y corriente», detalló.
«Es difícil mi situación como mujer y como funcionaria. No había visto elecciones tan complicadas, con tanta polarización. Hay lastimaduras y hay heridas, estamos confrontados y eso no es bueno en una democracia», indicó la magistrada.